En el corazón de la Sierra del Rosario, cerca de Soroa, florece un ejemplo inspirador de emprendimiento y sostenibilidad: la Finca Caléndula. Este proyecto, lidereado por Eloisa Bucourt Vigil, una maestra de profesión y agricultora por pasión, ha logrado convertir un terreno en desuso en un oasis de producción agroecológica y conservación ambiental.
Hace 11 años, Eloisa asumió el desafío de recuperar tres hectáreas de tierra en usufructo, un espacio que entonces se encontraba en muy mal estado: canteras abandonadas y vegetación invadida por el marabú. Con esfuerzo, dedicación y el apoyo de su familia y la comunidad, logró transformar este terreno en una finca de referencia nacional en la agricultura sostenible.
Hoy, la Finca Caléndula no solo genera empleo, sino que también juega un papel clave en la conservación de especies endémicas de la región y en la protección del patrimonio natural y cultural del occidente cubano. Su modelo de gestión equilibra la producción agrícola con la preservación ambiental, integrando además el atractivo turístico de la zona y el uso de plantas medicinales en su propuesta productiva.
Desde Valuarte, reafirmamos nuestro compromiso con el acompañamiento a los emprendedores cubanos y nos sumamos, junto a la Universidad de Artemisa y el Complejo Turístico Soroa, en una iniciativa nuestra de responsabilidad social para potenciar las capacidades productivas, la gestión empresarial y de desarrollo sostenible en esta finca.
Eloisa es un ejemplo de mujer cubana que con su determinación y su visión pueden convertir un sueño en una realidad transformadora para toda una comunidad.
Pronto compartiremos más detalles sobre esta iniciativa. Síganos en nuestras redes sociales @ValuarteCuba y acompáñanos en este camino para seguir siendo parte de historias de emprendedores cubanos.